En Reconquista
Preocupa el crecimiento del basural en calle Ireneo Faccioli
A la baja prestación de los servicios públicos en la gestión del intendente Amadeo Enrique Vallejos se le suma la actitud desaprensiva de algunos vecinos que dejan sus residuos en una arteria muy transitada.
Sin lugar a dudas que calle Ireneo Faccioli es la foto de la falta de controles de los organismos municipales y de la poca colaboración de una parte de la ciudadanía. La arteria que fue diseñada como ingreso o salida rápida del sector oeste de la ciudad, presenta una imagen deplorable en cuanto a la basura acumulada en uno de sus márgenes. La Secretaría de Servicios Públicos de Reconquista siempre ha sido un área muy sensible para cada una de las gestiones que gobernaron la ciudad, pero en el actual gobierno no da respuesta a los contribuyentes.
Son innumerables los reclamos en los medios de comunicación y mucho más aun en redes sociales, desde la batalla perdida con los pastos hasta la falta de asistencia de los regadores a las calzadas de piso natural.
Pero volviendo a Ireneo Faccioli llama la atención que una ciudad que se jacta de tener un servicio de monitoreo por cámaras muy sofisticado no ha logrado detectar quienes son los que han declarado al lugar como un basurero a cielo abierto. Mientras la basura se acumula la titular de la cartera de servicios goza de sus vacaciones y políticamente se especula si ingresa en su lugar Gustavo López u otros nombres que están en danza. Ireneo Faccioli, entre la 44 y la Ruta Nacional 11 de Reconquista, vecinos y transeúntes enfrentan un escenario desolador.
Complejo ambiental
GIRSU (Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos) es un sistema de manejo de residuos que se aplica en la ciudad de Reconquista, desde ese organismo aseguran que está operativo solo en la disposición final de residuos sólidos urbanos. Mientras que planta de clasificación no estará operativa hasta no contar con maquinaria propia para poder realizar todas las tareas necesarias. "Es necesario entender que si el complejo ambiental no dispone de maquinaria propia no va a poder estar operativo de manera adecuada nunca", comentó el encargado cuando Norte24 lo consultó.
Actualmente Reconquista, Guadalupe Norte y Nicanor Molinas están disponiendo sus residuos en el complejo ambiental. Avellaneda tiene su propio sitio de disposición final.
Anticipado
En la discusión bizantina que se dio en el Concejo Municipal a la hora de sancionar el prepuesto y la tributaria 2025, la concejal Arzamendia acusó a los opositores de querer desfinanciar al gobierno local y anticipó que si hasta ese momento los servicios eran deficitarios en el 2025 serían aun peores.
En ese escenario, la oposición enmarañada con su necesidad de protagonismo y el gobierno local tratando de sacar fondos de donde fuera, dejaron pasar ese anticipo, no así los contribuyentes que comenzaron a recibir sus facturas con incrementos contrastando con los servicios cada vez más deficitarios.
En la actualidad la prestación de los servicios no es precisamente una fortaleza para esta gestión de gobierno. Lo llamativo es el tiempo que se lleva discutiendo si es una tema de nombres o de recursos económicos. Los oficialistas dirán que están asfixiados por el concejo y la oposición dirá que tienen los recursos para hacer un buen trabajo, en el medio están los contribuyente que juntan pesitos por pesitos para pagar y los servicios que son cada vez más paupérrimos.
Vivir de la basura
Entre los desechos se encuentran bolsas de residuos domiciliarios, botellas de plástico y vidrio, pedazos de chapas e incluso gatos muertos dentro de bolsas. Esto generó gran preocupación e indignación en quienes transitan habitualmente la zona. Cuando realizamos este informe nos encontramos con un hombre que nos confirmó que vive de la basura: "Yo vengo y clasifico lo que puedo vender, hierro, cartones, papeles algún plástico", contó el vecino. Dijo que muchas veces se encuentra con bolsas con animales muertos, pero que lo que él busca es otra cosa. "Lo poco que saco lo uso para darle de comer a mis hijos, esta basura me queda cerca, vengo todos los días y me llevo en una bolsa lo que puedo vender", contó.