Presentaron el libro “Miguita de pan”, de la autora reconquistense Alba Acosta

La cita fue el pasado miércoles 8 por la mañana, en el marco de una actividad organizada por la Mesa Intersindical de Mujeres del Norte, de la cual AMSAFE forma parte bajo el lema «Mujer y Memoria» y la convoca para esta presentación.
Acaso un libro, un poema, un relato no sirvan para mitigar una tragedia tan íntima como colectiva. Quizá no alcancen para cubrir un dolor, una ausencia. Pero, a veces, son lo poco que tenemos a mano para devolverles los golpes.
Miguita de pan es, como libro, una respuesta desde la ternura, desde la suavidad, pero entendidas esa ternura y esa suavidad como armas para plantarse de cara al futuro, afirma el escritor chaqueño Mariano Quiroz.
Alba Argentina Acosta, quien nació en Misiones, pero a fines de la década del 60’ se instaló a Reconquista, fue detenida por la última dictadura cívico militar entre los años 1978 y 1982 y aún con toda esa carga de dolor encima, invita a construir una mirada esperanzadora del amor por sobre los infortunios y a entonar una canción capaz de interpretar la más humana y hermosa melodía: vivir.
-¿Qué significó para vos, después de tantos años de dolor, poder plasmar finalmente estos escritos en un libro?
A mí siempre me gustó la escritura, siempre escribí, desordenadamente y en cualquier lado, una poesía por acá, otra cosa por allá… pero a esta historia, yo necesitaba contarla. Entonces comencé con garabatos. Tenía todo por separado hasta que le fui encontrando de a poco la forma y el sentido también con que finalmente saldría a la luz… eso que se dice del libro, esa luz, esa ternura. Eso me tomó mucho tiempo, porque obviamente fue muy doloroso. Diría que más de veinte años. Pero fue también esa fuerza que nos dábamos las compañeras lo que me ayudó a contarlo, esa unidad, del saber que estábamos todas juntas en un lugar donde no teníamos otra posibilidad que resistir, de una manera tranquila, pero resistir al fin, con la ilusión de volver a ver a nuestros hijos y haciendo todo lo que necesitábamos hacer.
-Más allá del capítulo donde lo narra… brevemente, ¿por qué se llama “Miguita de pan”.
Tiene que ver con esa anécdota y esas palabras de mi hijo Manuel. Las visitas de ellos, nuestros hijos cuando estábamos en Devoto, eran sin contacto, salvo ese día que nos dieron 15 minutos para estar con ellos. Fue el día de la madre en el año 1980. Por supuesto para nosotros esos 15 minutos se fueron rapidísimos. Al llegar a casa en su vuelta, todos los preguntaban qué tal era su mamá, ya que fue la primera vez que pudimos abrazarnos y vernos sin locutorio de vidrio de por medio. Él, con su mente fugaz de niño y vaya a saber qué otra cosa en mente, respondió: “Mi mamá es una miguita de pan”.
-¿Cómo surge la propuesta de esta presentación y de este ciclo que llevan adelante junto a Amsafe?
Yo no hice mi presentación particular todavía… si una en conjunto con otras obras de la editorial (La Ochava Ediciones). Así fue que me convoca la secretaría de Derechos Humanos de AMSAFE para llevar adelante este ciclo, y coincidía justo con esta actividad en el marco de una jornada de lucha organizada por las Mujeres de la IntersindIcal del Norte, de la cual Amsafe forma parte bajo el lema «Mujer y Memoria». Es un orgullo y una alegría muy grande compartir este arte con tantas mujeres trabajadoras.
-¿Cómo sigue este calendario de presentaciones en 2023?
Este viernes 17 estaremos en la ciudad de Santa fe para presentar el libro en El Molino, fábrica cultural. Luego de eso seguiremos llevando el libro por toda la provincia, según dispongan desde el gremio. Y también tengo ganas de hacer una presentación particular, por mi propia cuenta. Ya habrá tiempo para eso.
-¿Hasta dónde te gustaría llegar con el mensaje de este libro?
En primer lugar, quiero que el libro le llegue al que le haga bien. La gente se conmueve mucho con estas historias. Entonces es para quien lo necesite. Y después, me interesaría que llegue a los jóvenes… que se vea en las escuelas, porque noto como que aún falta que nuestros jóvenes conozcan lo que pasó. Quisiera que el libro sea como una apertura a conocer la historia y que desde ahí se busque leer mucho más.
Miguita de pan es, como libro, una respuesta desde la ternura, desde la suavidad, pero entendidas esa ternura y esa suavidad como armas para plantarse de cara al futuro.